Biólogo
Por eso, la única alternativa de supervivencia para nuestro país es mantener al mismo tiempo superficies importantes de sus ambientes nativos y suelos dedicados a agricultura y ganadería, pero evitando que los cultivos y los campos ganaderos cubran todo. La existencia de parques y reservas naturales es insignificante para mantener la estabilidad ambiental de la Argentina.
Tenemos que proteger los ambientes nativos que todavía quedan, promover su expansión natural, y suspender desmontes por 10 años como mínimo. Mantener una superficie máxima de ambiente nativo permite amortiguar los efectos negativos del cambio climático (lluvias excesivas, sequías intensas, inundaciones). También habría que reducir, claro, la descarga de gases de efecto invernadero,
Paralelamente, para un futuro mejor, habría que contar con funcionarios del área de medio ambiente que tengan una buena formación en esas cuestiones.